Perdemos milenios en decenios, no podemos perder la cultura popular ni su arquitectura tradicional. ¡Ojalá consigamos hacer realidad esta utopía! #SalvemosLosPalomares

El Procurador del Común pide a la Junta medidas para conservar los palomares

Nuestro palomar utópico
Patrimonio Estas construcciones tradicionales se encuentran especialmente en Tierra de Campos y son un atractivo más de la Comunidad, en particular del Camino de Santiago, por lo que insta a que sean puestos en valor
Los palomares, que en otros tiempos sirvieron de sustento a las economías domésticas, son parte de la arquitectura tradicional de Castilla y León, en especial de la zona de Tierra de Campos, encontrándose muchos de ellos a lo largo del Camino de Santiago. Buena parte de estas construcciones se encuentran deterioradas y abandonadas a pesar del interés singular que presentan; por esa razón desde el Procurador del Común se consideró oportuno iniciar una actuación de oficio con el fin de obtener información sobre la acción que pudiera llevar a cabo la Consejería de Cultura y Turismo para potenciar el mantenimiento y conservación de los palomares existentes en la Comunidad.

Es cierto que a través de las Diputaciones Provinciales, como la de León, Palencia y Zamora, se han estado convocando subvenciones destinadas a la restauración de los palomares, o de estos inmuebles junto con otros integrantes de la arquitectura tradicional, dirigidas tanto a los particulares como a las Administraciones públicas y entidades propietarias, poseedoras o titulares de derechos reales sobre los palomares. No obstante, a pesar de estas acciones dirigidas a promover la conservación del Patrimonio Cultural de Castilla y León, buscando la corresponsabilidad de los propietarios y gestores de los palomares, no parece que esté asegurando el futuro del importante legado cultural integrado por el conjunto de palomares existentes en nuestra Comunidad.

La Consejería de Cultura y Turismo ha informado que recientemente se ha acometido la documentación y caracterización de los palomares tradicionales de la provincia de Palencia. Y, como actuación más específica, se hace alusión en el informe remitido al Defensor del Pueblo de Castilla y León a que, a principios de este año, se iniciaron los trámites para poner en marcha el proceso de contratación de la redacción de un proyecto de restauración del palomar de Carrascal de Duero (Zamora), en ejecución de una enmienda a los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma para 2018; si bien este proceso se ha visto suspendido por el estado de alarma declarado en virtud del Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, para la gestión de la situación sanitaria por COVID-19. Por ello se pide que la dotación presupuestaria para la restauración del palomar de Carrascal de Duero (Zamora) se ejecute en el plazo de tiempo más breve posible, en consideración a la demora que se ha producido en la materialización de la inversión.

Dada la importancia de estas construcciones y a la vista de las informaciones recibidas se ha instado a la Consejería a que, en el marco de la Ley de Patrimonio Cultural de Castilla y León, se desarrollen medidas eficaces para la conservación de las tipologías de los palomares, en particular de la zona de Tierra de Campos, asegurando el uso de técnicas tradicionales y de materiales autóctonos para su conservación y restauración; así como para impulsar la continuidad de sus usos y funciones genuinas en la medida de lo posible, así como la puesta en valor de los mismos, dando prioridad a aspectos sociales, pedagógicos y el acceso al público. 
Publicado: La Nueva Crónica

¡Qué guapín y prestoso sale nuestro palomar utópico en La Nueva Crónica!

Irma Basarte10.-

El Procurador del Común pide a la Junta medidas eficaces para conservar los palomares de León y Castilla

Estas construcciones tradicionales se encuentran especialmente en Tierra de Campos, en particular en el Camino de Santiago.

imagen
   Irma Basarte - ileon.com  | 16/06/2020 - 11:28h.
El Procurador del Común insta a la Consejería de Cultura y Turismo de la Junta a que, en el marco de la Ley de Patrimonio Cultural de Castilla y León, desarrolle medidas eficaces para la conservación de las tipologías de los palomares, en particular de la zona de Tierra de Campos, asegurando el uso de técnicas tradicionales y de materiales autóctonos para su conservación y restauración.

La institución que dirige Tomás Quitana también pide impulsar la continuidad de sus usos y funciones genuinas en la medida de lo posible, así como la puesta en valor de los mismos, dando prioridad a aspectos sociales, pedagógicos y el acceso al público.

Los palomares, que en otros tiempos sirvieron de sustento a las economías domésticas, argumentan, son parte de la arquitectura tradicional de Castilla y León, en especial de la zona de Tierra de Campos, encontrándose muchos de ellos a lo largo del Camino de Santiago.

Buena parte de esas construcciones se encuentran deterioradas y abandonadas a pesar del interés singular que presentan; por lo que desde el Procurador del Común se consideró oportuno iniciar una actuación de oficio con el fin de obtener información sobre la acción que pudiera llevar a cabo la Consejería de Cultura y Turismo para potenciar el mantenimiento y conservación de los palomares existentes en la Comunidad.

En su resolución se apunta que es cierto que a través de las diputaciones provinciales, como las de León, Palencia y Zamora, se convocan subvenciones destinadas a la restauración de los palomares o de estos inmuebles junto con otros integrantes de la arquitectura tradicional, dirigidas tanto a particulares como a administraciones públicas y entidades propietarias, poseedoras o titulares de derechos reales sobre los palomares.
No obstante, a pesar de estas acciones dirigidas a promover la conservación del Patrimonio Cultural de Castilla y León, buscando la corresponsabilidad de los propietarios y gestores de los palomares, no parece que esté asegurando el futuro del importante legado cultural integrado por el conjunto de palomares existentes en nuestra Comunidad, apuntan desde el Procurador.

La Consejería de Cultura y Turismo ha informado que recientemente se ha acometido la documentación y caracterización de los palomares tradicionales de la provincia de Palencia y, como actuación más específica, cita en el informe remitido al Defensor del Pueblo de Castilla y León que a principios de este año se iniciaron los trámites para poner en marcha el proceso de contratación de la redacción de un proyecto de restauración del palomar de Carrascal de Duero (Zamora), en ejecución de una enmienda a los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma para 2018, si bien este proceso se ha visto suspendido por el estado de alarma declarado en virtud del Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, para la gestión de la situación sanitaria por Covid-19.

Por ello, se pide que la dotación presupuestaria para la restauración del palomar de Carrascal de Duero (Zamora) se ejecute en el plazo de tiempo más breve posible, en consideración a la demora que se ha producido en la materialización de la inversión.

Algo bueno debemos estar haciendo por León.

#SalvemosLosPalomares

Publicado: iLeon.com

Irma Basarte10.- 

672 razones para comer pichón #SalvemosLosPalomares

Nosotr@s tenemos esta joyita de libro

Si estás interesado o interesada en alguna receta envíanos un email y la podemos colgar en el blog para compartirla con todo el mundo.

Ilustración de un cromo de Chocolate Amatller con receta de pichones./Ana Vega



Ilustración de un cromo de Chocolate Amatller con receta de pichones

Ésas fueron las que encontró Augusto Soler y Monés (junto al mismo número de recetas) para publicar en 1930 un libro de cocina enteramente dedicado a la carne de paloma

ANA VEGA PÉREZ DE ARLUCEA
Mucho ha llovido desde que la carne de paloma fuera algo habitual en las mesas españolas, y más aún desde que en El Quijote se contara que la comida más rumbosa en casa de Alonso Quijano eran los palominos del domingo. Si conocen ustedes Tierra de Campos recordarán la silueta de los palomares de adobe, testimonio del gran amor que la cocina tradicional tuvo siempre por los tiernos pichones y palominos. Que no son sinónimos, por cierto: el pichón es la cría de paloma doméstica y el palomino, lo mismo pero de paloma salvaje o bravía.

Pasto ahora de restaurantes Michelin, la carne de paloma fue un alimento de uso común hasta mediados del siglo XX, cuando la llegada del broiler americano y su cría intensiva abarataron el precio del pollo y lo convirtieron en el ave más consumida. Hasta ese momento las palomas fueron una estampa diaria en los mercados nacionales, cuestión que en 1930 quiso aprovechar un peculiar libro de cocina titulado 'Manual del perfecto cocinero: 672 fórmulas para guisar pichones' (Editorial Cervantes, Barcelona). Aquí hemos hablado ya de otros recetarios temáticos como el '100 fórmulas para preparar salsas' y '210 maneras con las que cocinar huevos', así que esta obra colombófila no podía faltar en nuestro repertorio. 

Bajo el nombre de A. Soler Monés, el autor del libro, estaba en realidad el ilustre señor don Augusto Berenguer Solér y Monés, empresario nacido en 1867 en Baracoa (Cuba) y emigrado a Cataluña junto a su familia en 1915. Se instaló en el Prat de Llobregat (Barcelona) y en una finca llamada Villa Paquita se dedicó a la ganadería y la agricultura con bastante éxito y mucho espíritu emprendedor, tanto como para convertirse en defensor de las más modernas técnicas de cría de cerdos, ovejas y palomas. Sobre esos temas escribió frecuentemente en revistas especializadas como 'El progreso agrícola y pecuario' o la catalana 'Agricultura i ramaderia', pero se ve que además le interesó extraordinariamente la cocina y de forma particular las aplicaciones sabrosas de aquellos pichones que criaba en Villa Paquita.



Portada del libro de Soler y Monés dedicado a la cocina del pichón.
       Portada del libro de Soler y Monés dedicado a la cocina del pichón.

672 recetas son muchas recetas. La mayoría de ellas Soler las sacó de libros de cocina ya publicados en España o el extranjero, pero hizo la simpática labor de compilar todas aquellas fórmulas relacionadas con las palomas o de adaptar otras tan sencillas como una sopa de ajo añadiendo en vez de agua, caldo de pichón. De la A a la Z el casi interminable listado de platos pichoneros incluye albóndigas de pichón, adobo de ídem, los mismos con alcachofas, asados de mil maneras posibles, con arroz, a la andaluza, a la aragonesa, pichones borrachos, budin de pichón, pichones a la bordelesa, confitados, en croquetas, en consomé, a la catalana, con champagne, a la cubana y la criolla (rindiendo homenaje a su tierra de origen), en cazuela, cocido con carne pichón, en empanada, encebollados, en ensalada, escabechados a la toledana, con espárragos, al estragón, fritos de diversos modos, con gelatina, guisados con verduras, como relleno de hojaldres, con huevos, pichones al jerez, al limón, morteruelo de pichón, menestra con filetes de ídem, en mole, con mostaza, a la marinera, al estilo madrileño, a la Marengo, en olla podrida, a la parrilla, rellenos, con distintas salsas, sandwich de pichón, decenas de sopas, pichones sorpresa, torta de pichón, en timbal, trufados, tortilla de sangre y menudillos, a la Tour d'Argent, con uvas, a la valenciana, a la Villeroy, a la vizcaína y con zanahorias glaseadas. Y eso por nombrar unas pocas de esas más de 600 fórmulas que aquel amante de las palomas pensó indispensables.


PICHONES AL VINO

'Manual del perfecto cocinero: 672 fórmulas para guisar pichones'. Augusto Soler y Monés, 1930
En un poco de manteca o aceite se doran pedazos de tocino cortados como dados, setas picadas, un poco de harina y dos pichos enteros o cortados al medio; cuando todo esté rehogado se cubre con medio cuartillo de vino blanco y se sazona con sal. Han de cocer a fuego fuerte.

Irma Basarte10.-